La televisión ha cambiado, y sin duda, la detective Amanda Rollins es una muestra de ello. Ella, a quien vemos en la serie Ley y orden: Unidad de víctimas especiales, es una mujer con los pantalones bien puestos, y además, un ejemplo de que las mujeres tenemos la inteligencia y astucia para afrontar cualquier clase de trabajo.
Es la actriz Kelli Giddish, quien le da vida a este particular personaje. Desde hace varios encarna a esta mujer, y asegura que este tipo de personajes son necesarios en la televisión, no solo para mostrar la fuerza del género femenino, sino también, para que las televidentes vean espejos de los casos de abuso de los que pueden ser víctimas.
«Las mujeres en la televisión, y en este tipo de series, pueden ayudar de dos formas diferentes. Primero, porque una mujer, con algún tipo de poder en un empleo, puede hacer pensar a otras que también pueden lograrlo. Y segundo, y para mí, el más importante, es que al ver espejos se sienten más seguras de denunciar antes las autoridades», aseguró la actriz.
Kelli asegura que más allá de la actuación y de ganar experiencia y reconocimiento con Amanda, Kelli siente que el participar en esta producción la llena de orgullo porque puede dar a conocer a la sociedad, todas esas problemáticas que están afectando al mundo.
«También lo veo como una gran responsabilidad, quiero que mi personaje se sienta lo más real y natural posible, para que los televidentes reflexionen sobre lo que pasa con la humanidad, y no simplemente cambien a Universal Channel para criticar, porque no creen en nuestros personajes».
La actriz dice que tan grande es el orgullo y la responsabilidad, que se devora, literalmente, los libretos cada vez que llegan a sus manos. «Debo confesar que leo mínimo tres veces todo lo escrito, y no solo para aprender mis líneas, sino para saber toda la historia primero que todos», asegura entre risas.
2011 fue el año en el que Kelli Giddish se unió a esta serie norteamericana.
Kelli asegura que respecto a su personaje, ella en lo personal ha aprendido de sus problemas. Cabe recordar que durante varias temporadas Amanda tuvo que lidiar con la adicción al al alcohol.
«Creo que ponerme al otro lado me hizo entender más por qué las personas deciden esconder sus problemas tras el alcohol, las drogas o las fiestas sin fin. Me cambió la visión, porque siento que ya no puedo juzgar. Gracias a Amanda aprendí que lo mejor que podemos hacer es entender y no criticar para hundir más a x o y persona».
Para la creación de este personaje Giddish no solamente escuchó las sugerencias del director, sino que además, buscó a sujetos que habían sufrido de adicción a la bebida.
Cuando se le pregunta por el éxito de la serie, pues ya casi completa sus 20 temporadas, Kelli es clara en asegurar que se debe a dos aspectos: los casos y los personajes.
«Siempre intentamos que los personajes principales cambien, pues eso es lo que ocurre con cualquier tipo de persona, se transforma a través de los años. A eso se suma que contamos en cada capítulo con estrellas invitadas que le dan diversidad a la producción. Muchos televidentes se quedan pegados a la pantalla chica con tal de ver a su artista favorito».
Respecto al segundo aspecto agregó que: «como ya lo había mencionado antes, queremos con los casos presentados reflejen lo que está pasando actualmente en nuestra sociedad. Eso hace que los televidentes se sientan identificados y le cuenten a más personas del programa, pues lo sienten cercano y real», concluyó.
Si en un comienzo Amanda tuvo tanta acogida, fue por su lucha contra la adicción al alcohol. Por eso siento, que nuestros personajes y su realismo, son una de las claves del éxito de esta serie», Kelli Giddish.
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