Nikki Belza era una exuberante bailarina y modelo a la que le cambió su vida de un momento a otro. La también camarera sufrió una grave infección llamada “sepsis” luego de hacerse un piercing en el pezón.
La mujer de 33 años nunca imaginó que un piercing colocado en su seno le provocaría casi perder la vida. Según informes de la propia Nikki, se preparaba para ir a trabajar cuando empezó a sentir una molestia en su pecho izquierdo. Decidió no hacer caso y seguir adelante.
Sin embargo, poco después, comenzaría a sentirse tan mal al grado de sudar frío, gritar del dolor y por último desmayarse. En seguida fue llevada al hospital, donde fue hospitalizada de emergencia debido a una fuerte infección causada por su perforación.
La camarera de Las Vegas tenía fiebre de más de 40 grados, le costaba trabajo respirar, hablar y hasta comer debido al dolor de cuerpo que tenía.
Luego de varios estudios se supo que padecía Estreptococo A, infección que más tarde desarrollaría “sepsis” o “septicemia” –una especie de envenenamiento en la sangre y órganos que podrían causar la muerte–.
Evidentemente su tejido mamario se vio gravemente afectado y tuvieron que extirpar una parte de él junto a su implante. A continuación algunas de las imágenes de Nikki tras el grave acontecimiento.
“Quedé devastada al verme con un solo seno y ahora soy totalmente plana de un lado. Pero sé lo afortunada que soy por estar viva. No puedo creer que hacerse un procedimiento tan simple como un piercing puede derivar en algo tan serio como una septicemia”, mencionó la modelo a un medio local.
A pesar de ello, la mujer está dispuesta a desafiar la muerte. Ya que, volverá al quirófano para recuperar su belleza. El objetivo de Nikki es recuperar su antiguo escote, desea que quede igual de llamativo que antes.
Así lucía Nikki Belza antes del piercing que casi le causa la muerte
Nikki Belza era una exuberante bailarina y modelo a la que le cambió su vida de un momento a otro. La también camarera sufrió una grave infección llamada “sepsis” luego de hacerse un piercing en el pezón.
La mujer de 33 años nunca imaginó que un piercing colocado en su seno le provocaría casi perder la vida. Según informes de la propia Nikki, se preparaba para ir a trabajar cuando empezó a sentir una molestia en su pecho izquierdo. Decidió no hacer caso y seguir adelante.
Sin embargo, poco después, comenzaría a sentirse tan mal al grado de sudar frío, gritar del dolor y por último desmayarse. En seguida fue llevada al hospital, donde fue hospitalizada de emergencia debido a una fuerte infección causada por su perforación.
La camarera de Las Vegas tenía fiebre de más de 40 grados, le costaba trabajo respirar, hablar y hasta comer debido al dolor de cuerpo que tenía.
Luego de varios estudios se supo que padecía Estreptococo A, infección que más tarde desarrollaría “sepsis” o “septicemia” –una especie de envenenamiento en la sangre y órganos que podrían causar la muerte–.
Evidentemente su tejido mamario se vio gravemente afectado y tuvieron que extirpar una parte de él junto a su implante. A continuación algunas de las imágenes de Nikki tras el grave acontecimiento.
“Quedé devastada al verme con un solo seno y ahora soy totalmente plana de un lado. Pero sé lo afortunada que soy por estar viva. No puedo creer que hacerse un procedimiento tan simple como un piercing puede derivar en algo tan serio como una septicemia”, mencionó la modelo a un medio local.
A pesar de ello, la mujer está dispuesta a desafiar la muerte. Ya que, volverá al quirófano para recuperar su belleza. El objetivo de Nikki es recuperar su antiguo escote, desea que quede igual de llamativo que antes.
Así lucía Nikki Belza antes del piercing que casi le causa la muerte
Tuvo que ser llevada a emergencias y perdió su seno.