El 22 de abril de 2010 una noticia conmovió al mundo de la farándula colombiana: la talentosa presentadora, Lina Marulanda, se había quitado la vida.
Desde entonces varias han sido las dudas de sus fanáticos y amigos alrededor de su muerte. ¿Qué la llevó a tomar la decisión? ¿Cómo fueron los últimos momentos de la paisa?
«Lina era una mujer muy sola. No tuvo apoyo de nadie. Ahora todos se quieren dar el título o la fama, como lo quieran llamar, sabiendo que ella no tenía amigos… era la persona más sola del mundo”, le contó Beatriz, madre de la presentadora a la revista Cromos.
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Sus problemas la habían llevado a la depresión y por eso tuvo que acudir a un psicoanalista. «Le mandó una pastilla para que se relajara pero le hizo el efecto contrario, aseguró Paulina, hermana de Lina. Se tomó una sola, y dijo no más y ahí se quedó el frasquito enterito. Y cada día iba mejorando y mejorando. Cuando pasara todo esto planeaba montar el negocio de la miscelánea que ella quería. Ya tenía todo en la casa”.
Según el repotaje de la Revista Cromos la noche anterior estaba feliz, porque había hablado con su esposo para que volvieran. La madre también relató que el día en que falleció le había pedido que le hiciera el desayuno y una torta de chocolate, pues le levantaba el ánimo. Sin embargo, horas después se lanzó por la ventana de su apartamento con el deseo de no regresar jamás.
La hermana de Lina dejó claro que todo lo dicho alrededor de su muerte era mentira. «Lo único cierto es que estaba triste”.
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