Uno de los más poderosos empresarios de obras públicas del país, el constructor Carlos Solarte, deberá enfrentar un llamado a interrogatorio en la Fiscalía por un caso de posible detrimento patrimonial que podría afectar a la Nación por cerca de 7 billones de pesos.
Este llamado se debería a la prórroga de contratos de las vías de la concesión Malla Vial del Valle del Cauca, las cuales fueron asignadas en 2006 y le darían a la concesión Solarte la administración de la obra por 35 años adicionales, hasta el 2054.
Esta prórroga, según reveló Caracol Radio, habría sido aprobada en términos muy poco favorecedores para los intereses de la Nación, y podría provocar en el período 2019-2054 un detrimonio patrimonial más oneroso que el de la pérdida de Isagén.
Solarte es uno de los contratistas más poderosos de Colombia, contando en su haber obras como la vía Girardot – Espinal – Neiva, la autopista Briceño – Tunja – Sogamoso, una participación por medio de Opaín en la administración del Aeropuerto El Dorado, y contratos asignados en 2015 para la construcción de las vías Mocoa – Neiva y la doble calzada Popayán – Santander de Quilichao.
Además de Solarte, serán llamados los estructuradores Patricia Cortés y Juan Manuel Martínez, así como asesores del extinto Instituto Nacional de Concesiones (Inco) que aprobaron las onerosas condicione ne los contratos.
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