Este martes inició en La Habana el que muchos esperan sea el último ciclo de diálogos de las negociaciones entre el Gobierno colombiano y las Farc. Incluso, se espera que el próximo jueves o viernes se conozca un acuerdo definitivo para finalizar las condiciones del cese al fuego bilateral y la concentración de guerrilleros para su desarme.
La inminencia de este acuerdo fue revelada por el senador Roy Barreras, acompañante de los diálogos de La Habana, en una entrevista a Caracol Radio. Según el presidente de la Comisión de Paz del Congreso, en los próximos días estaría listo el acuerdo y así «finalizará el conflicto».
Según Barreras, estaría listo un cronograma para presentar a la ONU que inicia la verificación del acuerdo de paz. «Los guerrilleros dejarán de serlo y deben movilizarse hacía las zonas donde permanecerán mientras que la ONU verifica, identifica a los hombres, se hace el registro de armas y su entrega. Eso tomará unos seis meses», dijo.
El congresista del Partido de la U aseguró que el presidente Juan Manuel Santos tiene programado un viaje a La Habana, el cual indicaría un acto similar al que se realizó el pasado 23 de septiembre para anunciar el acuerdo sobre justicia transicional.
Santos no confirmó ninguna visita a Cuba, pero reconoció la cercanía de los acuerdos. «Yo le ruego a Dios que nos dé esa fuerza para terminar estos acuerdos, ojalá esta misma semana, porque estamos ya a punto de lograr esos acuerdos. Si los negociadores hacen un último esfuerzo para lograr terminar ese punto definitivo, que es el cese al fuego y el cese de hostilidades, habremos dado un paso fundamental en la consecución de esa paz», dijo en un evento en Bogotá.
Posteriormente, en medio de la conmemoración de los 95 años del diario La Patria en Manizales, Santos insistió en la importancia de la firma del acuerdo, y en que las Farc entregarán las armas.
«Algunos dicen que las Farc no van a dejar las armas. Pues las Farc van a dejar todas las armas supervisadas por la entidad más importante del mundo entero, la autoridad más poderosa del mundo entero, que es el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas», aseguró.
El Jefe de Estado también añadió que no se dejará de perseguir la delincuencia cuando se firme el cese al fuego bilateral. «No vamos a bajar la guardia o a debilitar a las Fuerzas Armadas, las necesitamos presentes en todos los rincones de la patria, sino que vamos a darle más seguridad a los colombianos, lo que estimula sin duda más inversión y más seguridad económica», dijo.
Santos pidió a los medios que no difundan informaciones erróneas del proceso y « se limiten a eso, a informar, a decir mire, estos son los acuerdos y cuando vean los colombianos los acuerdos se darán que aquí lo que se negoció fue una paz responsable, una paz seria, aquí no estamos entregando nuestro modelo económico, nuestro modelo económico, no estamos sembrando la semilla del comunismo.»
Víctimas y reinsertados
Una de las preguntas más importantes es lo que podría suceder con los posibles desmovilizados de las Farc, algo que preocupa a miles de personas que ven lo que ocurre con la masificación de las bandas criminales y otros grupos asociados al post-paramilitarismo.
Según el director de la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR), Joshua Mitrotti, la entidad tiene la capacidad para recibir a los desmovilizados de las Farc y prepararlos para la vida civil, así como han trabajado con cerca de 49.000 personas en los últimos 13 años.
“Tenemos unas lecciones aprendidas atendiendo a población en condiciones muy parecidas a las de las personas que podríamos recibir, hemos sistematizado esta experiencia. Además, hemos desarrollado pilotos con una población de más o menos 600 personas recién salidas de los grupos armados que han estado en entornos controlados rurales», aseguró en medio de la rendición de cuentas de la entidad, en Cali.
Según cifras de la ACR, a abril de 2016, el 74,2 % de las personas que ingresaron al proceso se encuentran ocupadas, 21.775 aprobaron básica primaria, 8.058 básica secundaria, 14.452 son bachilleres y 2.750 han adelantado estudios superiores. Mitrotti destacó que tres cuartas partes de quienes se desmovilizan no vuelven a delinquir.
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