Las honras fúnebres de un hombre en el Cementerio Central de Cali se alteraron luego de que uno de sus asistentes cometiera un ilícito. Joven con casa por cárcel fue recapturado por esta imprudencia.
Cuando la caravana con el féretro llegó desde Siloé, un amigo del difunto realizó varios disparos al aire y causó confusión entre aquellos que se habían reunido para despedir el cuerpo.
Hasta ese punto llegaron varios uniformados de la Policía, quienes descubrieron que el autor de los disparos tenía un brazalete del Inpec y ya había recibido detención domiciliaria por el delito de porte ilegal de armas.
Al joven, de 24 años, se le incautó una pistola 9 MM con nueve cartuchos. Los disparos no dejaron lesionados y el hombre fue puesto a disposición de la justicia por el mismo delito por el que ya había sido procesado.
Vecinos del sector y vendedores en el cementerio aseguran que este tipo de hechos se presentan con frecuencia. Ante esto, la Policía recordó sus servicios de acompañamiento a las honras fúnebres.
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