Cuando fueron detenidos el 6 de diciembre pasado, los agentes de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. dicen que no notaron nada malo en la niña de 7 años que falleció horas después de cruzar la frontera.
De hecho, según la versión del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS, por sus siglas en inglés), su padre aseguró que estaban bien e incluso firmó un documento al respecto.
Pero la menor originaria de Guatemala murió 24 horas después de haber cruzado la frontera estadounidense desde México.
Su fallecimiento en un hospital se dio luego de que estuvo bajo resguardo de la Patrulla Fronteriza en Nuevo México, por lo que el DHS inició una investigación interna.