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Medía más de seis metros. Lo que una van, según afirman medios australianos. Este tiburón azul, en sí mismo, era impresionante:
Fue cazado en la playa Seven Miles, en Nueva Gales del Sur. «Matthew», su asesino, afirmó que esta playa siempre está llena de surfistas y que el gigantesco animal ya había causado varias muertes.
«Primero se tragó otro tiburón antes de cazarle yo», afirmó, citado por el periódico Northern Star. Matthew es un pescador con licencia y por supuesto, hizo lo que todos hacen : vender su presa por piezas. Solo conservó las mandíbulas. Se trataba de un tiburón tigre «pequeño, por los que había visto en comparación».
Ahora surge la polémica, igual a la del león Cecil, ya que las fotos del tiburón se hicieron virales.
«Eso siempre lo hemos hecho, solo que ahora todo está más sobreexpuesto gracias a las redes sociales», justificó Matthew.
En la galería verán la historia del león Cecil, que causó indignación en el mundo. Para leer la información desde un smartphone o tablet, seleccionen «ampliar galería» y luego «mostrar texto».