La fuerte situación de sequía que afronta el país a pesar de las lluvias esporádicas de los últimos días ha provocado una situación crítica en el Río Magdalena, que en pocos días ha perdido casi todo su caudal.
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Según Cormagdalena, en muchos puntos del canal de navegación del río tiene una profundidad inferior a un metro, y ocurre algo mucho más crítico: «con bajas muy significativas por que hace 24 horas antes, había presentado niveles de 25 centímetros, es decir que bajo bastante en un día», según su director, capitán Luis Álvaro Mendoza.
En puntos como Honda y Girardot, la profundidad ha descendido de tal modo que es posible cruzar el cauce a pie. Esto no solo afecta a los habitantes del valle por la pérdida de caudal para la navegación y la pesca: también sufren los acueductos de las poblaciones ribereñas que toman sus aguas del río.
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A esto se suman las altísimas temperaturas en el valle medio del Magdalena. Según el Ideam, las mayores temperaturas que la entidad ha registrado en el país se han medido en estos días en el centro del país. Puerto Salgar sufrió temperaturas de 45 ºC y Natagaima llegó a 44 ºC.
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El capitán Mendoza pidió que sea abierta la represa de El Quimbo, cerrada por una orden judicial, con el fin de permitir que aumente el caudal del río y se evite una situación crítica en sus riberas. En el mismo sentido declaró la Defensoría del Pueblo.
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