Cuatro trabajadores del Hospital San Juan de Dios, centro de Cali, resultaron heridos este lunes después de que una pareja les rociara un líquido corrosivo que se cree que sería ácido.
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Así lo confirmó el médico Iván González, director del centro asistencial, quien manifestó que el hecho ocurrió en un ataque de ira y de intolerancia de los progenitores de un bebé que se encontraba hospitalizado en el lugar.
Según González, la pareja habría dejado a su hijo recién nacido sin atención desde hace varios días, pues no habrían regresado al Hospital. Ante esto, las autoridades médicas entregaron este fin de semana al menor al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf).
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«Los padres acuden al servicio de niños recién nacidos y al no encontrar a su hijo bajan a la oficina de Asistencia Social, cierran la puerta e intimidan a las personas que están en el lugar con un recipiente. Ante esa situación se llama al personal de seguridad, quienes fuerzan las puertas. Los padres esparcen el líquido y los funcionarios que van ingresando, tres guardas y el jefe de Infraestructura, resultan afectados», manifestó el Director del San Juan de Dios.
Los lesionados fueron atendidos inicialmente en el servicio de Urgencias del mismo hospital. No obstante, por la gravedad de las lesiones, tres de ellos fueron remitidos al Hospital Universitario del Valle.
«De acuerdo a las indicaciones de su ARL, uno de los funcionarios afectados fue remitido a valoración por oftalmología y otros para cirugía plástica», agregó González.
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Voceros del HUV aseguraron que los lesionados fueron ingresados a la Unidad de Trauma del principal centro hospitalario del Suroccidente colombiano. Las víctimas fueron identificadas como Sindy Alejandra Ortiz de 30 años, Freddy Meneses de 40 años y Jhon Toro de 29 años, quienes llegaron con quemaduras de primer grado en la cabeza, el cuello y la cara.
La condición de los heridos es estable y se espera que en las próximas horas sean remitidos hacia la Unidad de Quemados del HUV.
«La idea de ellos era rociar a siete enfermeras. Nosotros recibimos el ataque fue por defenderlas. Mi compañera y yo nos intentamos cubrir; yo con una colchoneta y ella con una cobija. Pero nos alcanzó a caer el ácido», dijo desde el HUV Freddy Meneses, uno de los guardas lesionados en el ataque.
Los dos agresores fueron detenidos por las autoridades.
