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Apolinar Salcedo Caicedo
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Conocido como ‘Polo’, este abogado se convirtió en el primer y único alcalde invidente de la historia de Cali y de Colombia. Había sido elegido para el periodo que comprende entre enero del 2004 y diciembre de 2007, pero en mayo de su último año fue destituido por la Procuraduría General, que halló irregularidades en la contratación del sistema de recaudo de impuestos del Municipio. Lo sancionaron con 14 años de inhabilidad para ejercer cargos públicos.
Mauricio Guzmán Cuevas
Elegido alcalde de Cali por el Partido Liberal para el periodo que iba de enero de 1995 a diciembre de 1997, fue destituido en agosto de su último año de gobierno, después de que se le demostrara que su campaña había sido financiada con al menos $175 mil dólares aportados por el narcotráfico.
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Jorge Iván Ospina
El actual senador por la Alianza Verde fue el Alcalde de Cali entre enero de 2008 y diciembre de 2011. Pese a que su mandato cercano a la gente lo hizo una persona querida en los sectores más populares, estuvo rodeado de polémicas, como las Megaobras, los sobrecostos en las adecuaciones para los World Games y el programa de Guardas Cívicos. En la Procuraduría reposan al menos 27 investigaciones en su contra. Una de esas investigaciones acaba de suspenderlo por dos meses de cualquier cargo público.
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John Maro Rodríguez Flórez
Reconocido locutor que, haciendo campaña desde su programa radial, popular en muchos de los sectores más humildes de Cali, logró llegar a la Alcaldía para el periodo 2001-2003. Pese a que terminó su mandato, diez años después, en 2013, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia lo condenó a cuatro años de prisión domiciliaria, responsable del delito de interés indebido en la celebración de contratos, por un contrato que suscribió por $19 millones con una colega periodista.
Rodrigo Guerrero
Apalancado en la buena imagen que dejó en su primer mandato municipal, entre 1992 y 1994, Rodrigo Guerrero dejó el Concejo Municipal y se lanzó de nuevo en 2011, como candidato independiente, a la Alcaldía de Cali. Y lo logró: volvió a ser burgomaestre de los caleños, quienes esperaban que Guerrero repitiera la excelente labor de comienzo de los noventa. Sin embargo, su avanzada edad, la oposición de algunos sectores que entorpecieron procesos de movilidad y la guerra entre bandas criminales en la ciudad fueron algunos inconvenientes que empañaron su gobierno y dejaron un sabor agridulce entre sus electores.
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