“Calidoso, sa adj. Chévere, de buena calidad, cálido e interesante. Ej. Ese grupito está muy calidoso… Cumbamba f. barbilla… Cháchara f. discurso inútil y carente de fundamento. Sinónimo de carreta. Ej. Llegó hablando cháchara de su nuevo proyecto y no salió con nada”.
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No nos digamos mentiras: los caleños tenemos una manera compleja de hablar. Más allá del ‘mirá vé’ que en toda Colombia creen que decimos cada dos minutos, nuestro léxico está plagado de palabras que en otros contextos pueden pasar como desconocidas y hasta exóticas.
Esto fue lo que notó Diana Marcela Cuartas mientras trabajaba en Lugar a Dudas, un espacio dedicado al fomento y difusión del arte en la capital del Valle del Cauca, donde colombianos que no viven en Cali o personas de otros países llegan a hacer su residencia artística.
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“Todo el tiempo nos relacionábamos con estos residentes, pero era muy chistoso por ejemplo cuando venían holandeses, italianos o ‘gringos’. Pasábamos mucho tiempo con ellos y siempre tocaba volver a hacer una inducción de cómo se habla acá”, explicó Cuartas.
Como respuesta a este problema de diferencias culturales, esta comunicadora y artista visual de 33 años, egresada de la Universidad del Valle, publicó en agosto de 2011 Pasaje Cali, guía práctica de introducción a la cultural local, una cartilla que resume a grandes rasgos lo que cualquier foráneo debe saber sobre la capital del Valle del Cauca.
Pero Cuartas sintió que debía ir más allá. Y así fue como en diciembre de 2013 publicó el diccionario ‘Caleño sin Barreras’, un fanzine de 24 páginas que recopilaba más de 300 términos que podían dejar fuera de lugar a cualquier extranjero que los escuchara sin saber su significado.
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“Lo que pasa es que con el paso del tiempo la gente me empezó a decir que me faltaban unas y otras palabras, porque siempre hay nuevas palabras que se están inventado o poniendo de moda. Así que por eso sacamos esta segunda edición, con 60 páginas y más de 1000 palabras”, explica Cuartas.
¿Cuál es la utilidad que un caleño le puede dar al diccionario ‘Caleño sin Barreras’?
Lo que hemos visto es que la gente se divierte mucho cuando lo lee. El que no conoce las palabras, lo disfruta porque se entera y aprende. Y el que las conoce, se divierte al encontrar palabras de antaño que quizá había olvidado.
También ha causado mucha gracia la utilización de ejemplos para explicar el uso de las palabras. La mayoría de los diccionarios no te ponen el ejemplo de cómo se ponen en práctica realmente, entonces el ejercicio que hice fue mirar usos reales que se le daban a los términos, en encabezados de noticias o en frases de la cotidianidad con mis amigos o familia. Cuando la gente se encuentra esto, se divierte porque ve reflejado lo que significa ser caleño.
¿Qué palabra que esté en el diccionario es la que más te ha llamado la atención en tu proceso de investigación?
Por ejemplo, cuando me hablaron de los ‘cocacolos’, que eran como unos zapatos, pero también era una gente. El término surgió con la canción ‘Los cocacolos’, muy famosa en Cali hace décadas, pero luego era la manera de referirse a una tribu urbana. Eso no me lo imaginaba y me sorprendió mucho.
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‘Chichipato’, ‘Chapeto’, ‘Changón’, ‘Chancuco’, ‘Chuspa’. Hay muchas palabras con la combinación ‘ch’ en este ‘caleñol’ que hablamos acá…
Sí, es una letra muy extensa en el diccionario caleño. De hecho, en Caleño sin Barreras la manejo como una letra independiente de la ‘c’, por el gran número de palabras caleñas que inician con esta combinación gramática.
¿Dónde se puede comprar y cuánto vale ‘Caleño sin Barreras’?
El libro vale $15.000 y se puede comprar en Lugar a Dudas (Calle 15N #8N-46), en la tienda del Museo La Tertulia (Avenida Colombia #5-105 Oeste), en la tienda Pulpo Ink Ropa y Decoración (Carrera 25 #2-92), en la pastelería Dulce Dulcinea (Carrera 26ª #3-54) y en La Cafebrería en la Biblioteca Centenario (Avenida Colombia con Calle 4 Oeste).
