Una brigada de tres médicos y cuatro auxiliares atendió este viernes a los 23 trabajadores de empresa Unimetro, una de las cuatro operadoras del MIO, quienes hace tres días se tomaron pacíficamente la Catedral de San Pedro de Cali como protesta.
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Dentro de las actividades que se realizaron, se practicaron valoraciones médicas generales, toma de presión arterial, hidratación y registro de los signos vitales.
“Algunas personas sufren de la presión arterial y al estar aquí (en la Catedral) se han descontrolado por no tomar sus medicinas a tiempo, otras tienen elevados los niveles de azúcar, lo cual también estamos controlando con atención focalizada”, expresó el Secretario de Salud de Cali, Alexander Durán.
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Como se recordará, los manifestantes, quienes trabajan como motoristas de los buses del MIO, decidieron que permanecerán en la céntrica iglesia de la capital del Valle del Cauca como protesta porque, según dicen ellos, hace tres meses no les pagan el salario.
Según los trabajadores de Unimetro, la empresa también ha incumplido obligaciones laborales en temas de seguridad social, dotaciones para empleados y vacaciones.
«Nos cansamos con estos gobiernos corruptos, de estar poniendo la queja a todos los entes territoriales sobre nuestras necesidades y que no nos hagan caso», señaló en el momento de la toma Eder Pontón, vocero de los manifestantes.
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Con la toma pacífica, los 23 hombres que permanecen en la Catedral quieren presionar a que autoridades como el Ministerio de Transporte, Metrocali y la Alcaldía de Cali los escuchen y se encarguen de sus respectivas reclamaciones.
La manifestación continuará hasta que sean escuchados, dicen los motoristas. Organismos como la Personería de Cali y la Defensoría del Pueblo prestan atención permanente sobre el caso.
